Dolor agudo de pecho - Sospecha de embolia pulmonar
Los exámenes por imágenes no son necesarios para muchos pacientes de los cuales se sospecha que tienen un coágulo sanguíneo en los pulmones, conocido como embolia pulmonar (EP). Para los pacientes estables desde el punto de vista médico, el riesgo de una EP se debe evaluar primero mediante el uso de las preguntas estándar acerca del paciente y sus síntomas. Si las respuestas a las preguntas resultan en un puntaje de bajo riesgo, no se requieren estudios adicionales.
Si las respuestas indican la posibilidad de una EP, se recomienda un análisis de sangre (d-dimer) para evaluar la presencia de una sustancia que se libera cuando se rompe un coágulo sanguíneo. Si la prueba resulta negativa, no se requieren estudios adicionales. La prueba d-dimer no debe ser utilizada en cualquier persona de la que se sospecha la presencia un coágulo sanguíneo debido a otros motivos, tales como una cirugía o trauma reciente, o para mujeres embarazadas.
Si las respuestas a las preguntas estándares indican un alto riesgo de EP y la prueba d-dimer es positiva, en la mayoría de los casos el próximo paso será una angiotomografía por TAC (ATC) — una exploración por TAC para observar los vasos sanguíneos de los pulmones. Para las personas con síntomas de un coágulo sanguíneo en la parte inferior de la pierna, especialmente en las mujeres embarazadas, generalmente la primera opción para reducir la exposición a la radiación es un ultrasonido Doppler. El 80% de las EPs están asociadas con coágulos sanguíneos en la parte inferior de las piernas. Además, se podría realizar una radiografía del tórax para descartar otras causas tales como la neumonía o líquido los pulmones. Los exámenes de medicina nuclear por ventilación y perfusión son utilizados a veces en lugar de la ATC.
Esta página fue repasada en 2021-12-15